Los queloides se producen como consecuencia de una cicatrización anormal. Es un crecimiento de tejido fibroso sobre una cicatriz que puede haberse producido por una herida, corte, intervenciones quirúrgicas, acné, varicela, piercings…
Los queloides son más frecuentes en gente joven (10-30 años), raza negra y asiáticos. Existe una predisposición hereditaria. Algunas localizaciones son especialmente propensas a la formación de queloides, como el lóbulo de la oreja, la región del escote y la pared torácica. La mayoría de queloides aparecen en el transcurso de un año después de la intervención o herida y no involucionan con el tiempo.
¿Qué síntomas producen los queloides?:
• Induración de la piel.
• Coloración carne, rojo o rosada
• Protuberante (nodular) o con rebordes prominentes.
• Picor, dolor o alteraciones en la sensibilidad.
El tratamiento de los queloides es un tema complejo en ocasiones.
En el caso que os muestro en la fotografía, optamos por exéresis tangencial de la lesión, electrocoagulación e infiltración de corticoide intralesional el mismo día de la intervención. La fotografía del resultado (que podéis ver a la derecha) se realizó a los 6 meses de la intervención de nuestro paciente.
Agradecer el consejo del gran maestro Didac Barco, y recomendaros su magnífico curso de queloides del cual estoy aprendiendo mucho sobre el manejo de estas lesiones que en algunas ocasiones se nos resisten a múltiples tratamientos.
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